Celdas Fotovoltaicas / Colectores solares

Las células solares, también llamadas células fotovoltaicas, son dispositivos semiconductores que convierten la luz solar en energía eléctrica. Su funcionamiento se basa en el efecto fotovoltaico: cuando la luz solar incide en la célula solar, se liberan electrones en ella, que fluyen en un circuito para generar energía eléctrica (Umweltbundesamt, 2023).

Como fuente de energía renovable, las células solares permiten utilizar la energía solar disponible infinitamente. También son amigables con el medio ambiente, ya que no producen emisiones nocivas y contribuyen así a reducir las emisiones de CO₂. Además, permiten independizarse de los combustibles fósiles y pueden utilizarse para la generación descentralizada de energía (Glover & Hoffman, 2023). Se pueden utilizar en una amplia gama de dispositivos y de formas muy diversas.

Existen distintos tipos de células solares: monocristalinas, policristalinas y de película fina. Las células solares monocristalinas están formadas por un único bloque de silicio cristalino y ofrecen altas eficiencias. Las células solares policristalinas constan de varias células de silicio cristalino y son menos caras. Las células solares de película fina están formadas por finas capas de materiales semiconductores y pueden ser más flexibles (Energie-Experten, 2023).