Hidrógeno "Verde"

El hidrógeno "verde" se produce utilizando fuentes de energía renovables como la energía solar o la eólica. En este proceso, el agua se descompone en hidrógeno (H2) y oxígeno (O2) mediante la electrólisis. Se hace pasar una corriente eléctrica a través del agua, liberando gas hidrógeno (Ministerio Federal de Educación e Investigación [BMBF], 2022).
El hidrógeno "verde" ofrece la ventaja de ser una fuente de energía con bajas emisiones de carbono, ya que sólo produce dióxido de hidrógeno (H₂O) durante la combustión y ninguna emisión perjudicial para el clima, como el dióxido de carbono (CO₂). Además, puede servir como medio de almacenamiento de energía porque puede utilizarse en pilas de combustible o motores de combustión para generar electricidad y calor cuando sea necesario (Europäisches Parlament, 2021). Asimismo, se puede utilizar en procesos industriales, el transporte y la industria energética como sustituto de los combustibles fósiles para reducir la huella de carbono de estos sectores (BMBF, 2022).
Existen diferentes tipos de hidrógeno "verde" generados en función del proceso y de la fuente de energía renovable utilizada. Entre ellos se encuentran la electrólisis PEM (membrana de intercambio de protones), la electrólisis alcalina y la electrólisis a alta temperatura (Smolinka T., Günther M. & Garche J., 2011).