Bombas de calor

Las bombas de calor son sistemas de calefacción y refrigeración que toman energía del ambiente y la elevan a un nivel de temperatura superior para satisfacer las necesidades de calefacción o refrigeración de un edificio. El modo de funcionamiento se basa en el principio del intercambio de calor y el uso de procesos termodinámicos (Bundesverband Wärmepumpe e.V. [BWP], 2023).

Las bombas de calor extraen energía térmica del medio ambiente (por ejemplo, aire, agua o el suelo) con la ayuda de un refrigerante que circula en un circuito cerrado. El calor se absorbe y se libera mediante evaporación y condensación, con lo que el refrigerante cambia su estado de agregación y aumenta o disminuye la temperatura (BWP, 2023).

Las ventajas de las bombas de calor residen en su alta eficiencia energética y su respeto por el medio ambiente, ya que suministran más energía térmica de la que absorben en forma de electricidad. (Cleanthinking, 2023)

Existen distintos tipos de bombas de calor. Las bombas de calor, aire y agua utilizan el aire ambiente como fuente de calor y transfieren la energía térmica a un sistema de calentamiento de agua. Las bombas de calor agua y geotérmicas utilizan el agua subterránea o el suelo como fuente de calor y son más eficientes, pero más complejas de instalar (Viessmann, s. f.).